Publicado en A partir de 10 años

Chispas de vida

Encuentro tu ilusión en tu mirada

llena de risas, llena de dicha.

Mirando a la ventana del camino

Con ojos nuevos y sin prisas

Sabiendo que eres magia y

eres chispas, centelleantes de vida.

Encuentro una verdad sin disfraz en

los niños de las mil sonrisas,

¡soñad, soñad!

y lanzad vuestros deseos

y vivid, vivid llenos de estrellas,

que vuestra luz sea faro cada día.

Dejad desplegadas las velas,

que el viento sople fuerte

y os dejen viajar rumbo al corazón,

ruta de nuestras vidas.

Volad, volad, pero nunca, nunca

dejéis de ser simplemente lo que sois, niños.

Aquellos que fuisteis, que son y que serán.

Que en vuestra alma flote siempre

el esplendor de los eternos días.

Publicado en A partir de 12 años

Eterno azul

A la orilla de los recuerdos luminosos

se buscan los peces escondidos de la tarde,

vuelven los castillos ardientes de la arena

y bailan las ondas marinas como antes.

Navegan pensamientos errantes

entre las olas de mi corazón

y se vuelven gaviotas que

atraviesan el horizonte.

Han vuelto las huellas en la arena

a traer las rocas de la brisa

y ruedan entre la espuma

los sueños que un día lancé al eterno azul.

Publicado en A partir de 10 años

Luces

Aquellas luces que vuelan en el atardecer

casi las recuerdo desde lejos,

están en mi corazón cuando lo veo

son como destellos de verano,

casi como fuegos que iluminan el cielo,

desde la noche de mis recuerdos.

Fuegos artificiales que brotan del mar

y disparan flores, palmeras de sueños,

en el cielo de mi fantasía,

en la bahía de mis sueños,

camino junto a mi padre

para volver a ser niño

y escuchar verdiales y panderos

entre la brisa del mar

y en las manos pequeñas de mis deseos.

Publicado en A partir de 8 años

Sombra de un recuerdo, Jorge Muñoz Bandera

En la sombra de tu recuerdo iluminado
te encuentro en las estrellas ya dormido
aquellas que guían los caminos, en los mares
aquellas que anuncian la llegada de un Niño.

Y miro las fotografías de retazos de una vida
y te encuentro, mi abuelillo, en estos días,
con tu gorra y tu bastón, vestido de aventurero,
vestido de Santa Claus, regalando tu corazón.

Los villancicos suenan y me recuerdan a ti
tú y yo cantando, mi abuelillo, en esta noche feliz.
Noche de Paz, Noche de Amor, y yo con mi corazón en tu interior.

Vuelvo a verte entrar a casa cargado de regalillos
tus caramelos, mi abuelo, llenos de tanta ilusión.
Tus cuentos mi gran amigo, con la música heredada
que tanto, tanto nos unió.

Jorge Muñoz Bandera

27 de Enero 2021