Publicado en A partir de 7 años, Cuento

Los exploradores del tiempo. Capítulo 2. La habitación lila

    La pandilla de los cinco exploradores habían comenzado su misión: Viajar en el tiempo.

     La tienda de campaña de Julián convertida en máquina del tiempo se iluminó como una estrella fugaz y fueron lanzados a una velocidad de miedo por un túnel oscuro y lleno de curvas hasta que frenó de repente. Los exploradores de la Historia no se atrevían a salir de la tienda para ver si, de verdad, había funcionado el invento de Julián, pero Carla, que era la más valiente, decidió asomarse por la abertura.

     — ¡Ooooh! Esto es una habitación —exclamó Carla.

     — ¡Lo sabía! Es imposible construir una máquina del tiempo —refunfuñó Pablo.

     — No, no. Es otra habitación —decía Carla con la cabeza fuera de la tienda

     — A ver… ¡Quiero verla! —dijo Paloma, a la que le encantaba el misterio.

     Los exploradores salieron y se encontraron en un cuarto pequeño con dos puertas y los muebles de color amarillo y antiguos.

     Rafa hacía gestos extraños con la cara, como le pasaba siempre que se ponía nervioso.

     —  ¡Orejas desconchadas! —dijo Rafa para no soltar un taco— Es Vicent Van Gogh.

     Y es que, en la habitación, había un hombre pintando, y tenía una venda que le tapaba una oreja.

     — ¡Ay, mi madre! —se quejó Pablo mientras se tapaba la cara con una mano. —A ver quién es el guapo que explica esto.

     Julián se vio en la obligación de pedir perdón al pintor por ser él quien había inventado la máquina del tiempo.

     — Perdone, señor. Estamos viajando en el tiempo y hemos aterrizado en su dormitorio sin querer.

     — Ja, ja, ja —se rió Carla. Le había hecho mucha gracia la explicación de Julián.

El hombre tenía la boca abierta del susto.

  —  Pero ¿Quiénes sois? —Preguntó el pintor.

— Venimos del siglo XXI —siguió Julián—. Estamos probando mi máquina del tiempo.

      — ¡Dichosos mocosos! ¡Fuera de mi habitación! —gritó Van Gogh y les lanzó un pincel que cayó dentro de la tienda.

  Todos corrieron a la máquina del tiempo y Julián apuntó al agujero negro que los devolvería a su casa. Ninguno de los chicos se dio cuenta del regalo que Vicent Van Gogh les había hecho con su pincel.

Foto de Steve Johnson en Pexels

LOS EXPLORADORES DE LA HISTORIA

Imagen de Cabecera: La habitación de Arlés de Van Gogh. Dominio Público. Wikimedia.org

Olga Lafuente.

Autor:

Amante de las letras. Escribo y leo mucho. Empecé con microrrelatos y relatos cortos, realizo retos para practicar y conseguir experiencia. Estoy trabajando para escribir obras más largas. Todo esto lo hago aquí, en mi laboratorio de escritura y mi cuenta de Twitter @Olga_Lafuente.

5 comentarios sobre “Los exploradores del tiempo. Capítulo 2. La habitación lila

  1. Jo, menuda aventura han vivido estos chicos. ¿Quién podría decir que esta máquina del tiempo creada por ellos funcionaría? Y yo me pregunto, ¿qué haría esta pandillita con lo que va encontrando? ¿Cambiaría la línea del tiempo? Uis, que divertido este capítulo, permite al lector continuar pensando y creando.

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